El miso es un alimento de gran riqueza proteica y vitamínica, obtenido a partir de la fermentación de la soja con un cereal o bien con otra leguminosa, muy usado en las comidas orientales para enriquecer y complementar los diferentes platos y muy valorado dentro del mercado artesanal, macrobiótico y naturista.
El miso contiene varios agentes digestivos: enzimas naturales, lactobacilus, levaduras resistentes a la sal, mohos, etc., que provocan el desdoblamiento de las proteínas, haciéndola fácilmente asimilables, además posee vitaminas enriquecedoras que acompañan dicha asimilación. Cabe mencionar la vitamina B12, presente de manera importante en este alimento.
El proceso de desdoblamiento de proteínas se inicia en el miso y continúa en el intestino, esto significa que además de su aporte en aminoácidos y vitaminas, contribuye a un mayor aprovechamiento de los otros alimentos, el efecto es similar al del yogurt.
El miso tiene bajo contenido en aceites no saturados es rico en lecitina y ácido linoleico, que ayudan a eliminar el colesterol y otros ácidos grasos del sistema circulatorio. Alcaliniza la sangre otorgando mayor resistencia a las enfermedades y contribuye al fortalecimiento del sistema circulatorio, ayuda a la desintoxicación de nicotina y otros elementos contaminantes.
Hola!! me encanta el blog y las recetas, estoy por probar el primer plato, hasta ahora utilicé el misomiesan -que tengo en mi heladera a punto de terminar- con simples recetas de arroz y aún con fideos, acompañandolos con algún toque de miso quedan estupendos y rápidos para solucionar el plato diario. Gracias por estas exquisitas indicaciones. FELIZ 2012!!!
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